Tuesday, March 26, 2013

Desde Siberia con amor.





Me he levantado con una sensación de realización extrema y con la necesidad inmediata de enviar a todos mis amigos las fotos que hice anoche.


En seguida me he dado cuenta de que no me había encontrado a Bruce Springsteen y a Little Steven paseando por el Barrio de las Letras y tampoco habían subido a casa a echarse unas fikas. Era todo un sueño y además estoy en Londres.
Pero qué bien lo pasamos.
Oh, bueno.

Ahora estoy en el tren de las 8:42 a Basingstoke preguntándome por qué merezco en la vida que se me siente enfrente un tipo que desayuna croissant de cebolla.
Me voy a cambiar de asiento.
Ya.

También me pregunto por qué es 26 de marzo y alterno orejeras con gorro de ruso, llevo guantes de animal y tengo que usarlos para tocar el picaporte de la puerta de mi habitación a las 6:13 cada mañana. Creo que la marmota Phil vio su sombra y la de su prima.

Estos días trabajo mucho, en lugar de vivir en mi clásica procrastinación y en mi ya conocido morro que llevo practicando tantos años. Incluso fui a Madrid por trabajo y trabajé. Siento que alguien me ha timado.
Aún así lo pasamos bien en Madrid, con nuestros dos o tres amigos, y en el pueblo, con nuestros tres o cuatro animales y progenitores.

Volé de nuevo desde la T4S alias Cuenca, para ir hacia mi querido City Airport.
En el avión, una voz de mujer nos daba la bienvenida a mí y a un grupo de adolescentes en viaje de estudios.
Veamos. Avión pequeño, con un instituto entero a bordo, pilotado por una fémina, en un día extremadamente nublado. Yo soy de clichés, y eso grita DRAMA BASADO EN HECHOS REALES.

Todo fue bien, y conseguí resolver mi modelo de optimización con una Heineken y unos Lacasitos que cuentan como gasto de almuerzo.

Al llegar, pensé que había cogido el avión equivocado a San Petersburgo, pero no, era aquí donde hacía -4 grados.
Mis amigos queridos son todos bastante gueis y no querían salir. Así que tras gastar suficiente eyeliner para maquillar a todos los suricatos de La Vida de Pi, me lo tuve que quitar, ponerme el pijama y ver Girls. La verdad es que, planazo.
No me trago que Hannah se tire a todos esos, especialmente a los que están buenos, pero por lo demás es una gran serie. ADAM.

Al día siguiente, mi flamante Oyster Travelcard de £35 y yo no pisamos la calle. Vinieron los amigos y me dieron cervezas, patatas y zebro.
El zebro y las patatas de Dixy no son compatibles, la bulimia no es la solución. Así que tenía que elegir entre dejar la droga o las patatas y he elegido quedarme con las patatas.
Una decisión muy fácil.

Domingo de frío extremo, qué mejor idea que pasear por el río. Pero es que tenía que llevar a Wally, mi nuevo pez, a ver su verdadero origen. Le hizo extrema ilusión, especialmente porque siendo un muñeco de dedo como todos los demás, su primera foto fue con monumentos, y eso les gusta mucho.

Después de una copiosa comida en Gourmet Burger Kitchen y un bonito paseo hasta Bermondsey, nos encaminamos a South Woodford a comer tortilla de patatas genuina de Ponferrada. A pesar de la deconstrucción y de tener que estar en la cocina con abrigo, fue una experiencia maravillosa.

Me despido desde Walton-On-Thames. Realmente sólo quería decir lo de Bruce Springsteen.

Friday, March 8, 2013

Aren't you lucky?



No tengo más ganas de trabajar hoy.

Ya, ya sé que nadie trabaja los viernes por la tarde, pero yo sí. Un poco. Salvo el tiempo que he empleado en pintarme las uñas en el baño, las 7 fikas que me he echado y los 20 minutos que he estado escondida en la sala de reuniones escuchando música y viendo el trailer de RESACÓN III.

Estos días he venido a la oficina. Un par de días a la semana no es moco de pavo. No es fácil elegir la ruta sin Travelcard. Ayer sólo gasté £2.80 en el trayecto, y aunque estuve atascada en Kew durante 25 minutos detrás de una furgoneta naranja, luego obtuve 3 pintas gratis. La optimización es lo mío, chavales.

He decidido no beber más couk en casa, y ahorrar esos £3.85 e invertirlos en posesiones materiales. Estoy en una racha de querer posesiones materiales que no os lo creéis. Es una pena que ninguna de ellas exista, como una simple regadera o una alfombrilla para el ratón. Apuntadlo: quiero una regadera. Una roja, o color crema, de metal, vieja. No existen en el mundo.

El caso es que sin beber couk en casa y sin querer entrar en la dinámica de beber alcohol sola, estoy experimentando situaciones como la del miércoles por la tarde. Decidí que tres cafés habían sido suficientes, entonces me hice un té clipper organic. Me tomé el té trabajando, y vi Hitchcock. Me gustó.
Después de ese estúpido té, decidí tomarme otro. Esta vez un té verde. La verdad es que la única razón por la cual me hago tés es para que parezca que a veces hago una vida de personaje de rom-com, que se sienta en su sofá con su manta, toma té y lee su libro. Para esta pretenciosa situación cinematográfica escogí poner el disco nuevo de Nick Cave. Pensaba continuar leyendo Prozac Nation, pero me pareció ya que el universo iba a implosionar si habita en él alguien que va TAN de guay, así que cogí mi revista Empire.
Revista Empire, cigarrillo, té verde, Nick Cave. En la cuarta canción, quité el puto disco de Nick Cave, porque una cosa es querer hacer una escena de tarde lluviosa y tranquila, y otra querer morir.
Cambié a mi lista de reproducción "Temazos para vaguear en el sofá leyendo y haciendo el atrezao". Y luego solté la Empire y cogí mi té con las dos manos, con mi jersey grande con las mangas por encima de las manos (CLARO) y miré al vacío.
En ese momento mi compañera de piso me vio por la rendija de la puerta y procedió a preguntarme si estaba bien.
No es habitual que alguien como yo se dedique a hacer el atrezao de una manera tan creíble, así que supongo que la siguiente escena de la peli habría sido en la cual le explico qué pasa en mi vida. Pero no, simplemente le dije "Sí, me he quedado aquí. Así. Me he quedado".
Ah, añadir que la gata estaba en mi cama, mirando con ojos de gato que se aburre.

Todo eso realmente ocurrió porque estaba esperando a que se bajase Life of Pi en BluRay. No entendí muy bien qué le pasa con Dios, pero no está mal la película.

Bueno, ya está. Me voy a casa a dejar mi mochila, vestirme de Joan Cusack en Armas de Mujer y echarme a las calles Friday On My Mind.

Wednesday, March 6, 2013

El Hak en Hakers


El sol ha brillado estos días y he sentido que estaba en un motel de carretera de California, sin poder salir, fugitiva de la justicia y escondiéndome de Louie. Louie podría ser mi antiguo chulo o camello. No lo he decidido.

Llevo cinco días sin abandonar la casa, con Cheech la gata. Creo que otro día más y empezarán a salir gatos de debajo de la cama. Por suerte no puedo comer gracias a mi sinusitis, y no me crecerán tarros de litro de Ben & Jerry's Chocolate Chocolate Chip para completar el cliché de CAT LADY.

Novedades? Estoy haciendo un Master en Transport for London. Creo que cuando haya pasado un año en Hackney podré presentarme a un empleo en TfL y sabré detallar las mejores rutas y horarios para ir desde cualquier punto de la ciudad a otro, con una especialidad en Aeropuertos y Terminales.
Gracias a mi extensa investigación, logré caerme en el gap del Overground. Tuve suerte y fue una caída técnicamente muy bien efectuada, con el mínimo riesgo para la vida y las extremidades, si bien aterricé sobre un envase que había contenido Fish & Chips sólo para agregar un poco más de humillación a la situación en general.
Decir que gracias a esto evito el Overground en hora punta cual perro de Pavlov, pero he conseguido llegar al trabajo via otra ruta en 70 minutos, 40 de los cuales paso echando una fika y luego tomando un café en el tren mientras leo un libro a la semana. Es un commute muy placentero, y soy una persona completa y activa.
Aunque hace tantos días que no voy al trabajo que a lo mejor se me olvida.

Más novedades... Traje a Mickey, mi minicadena, en el último viaje que hice a Madrid la semana pasada. Ahora puedo hacer una fiesta rock n roll. Sólo me falta tener más de tres amigos y I'm all set.

En Madrid... Bien. Es muy difícil conseguir salir, ya que la gente (sí, VOSOTROS) no quiere salir un Lunes. Ya ves tú, qué tendrá de malo salir un lunes? Las hermanas no nos rendimos y salimos un lunes. Decidimos que ya estaba bien de salir por el barrio, que íbamos a probar otros lugares. Optamos por Lavapiés. Yo en general desprecio Lavapiés, pero tras la buena experiencia del nuevo bar "El Gato Verde" pensé que encontraríamos algo que estuviese bien y no fuese hindú. Nos perdimos por Lavapiés y no encontramos nada satisfactorio, así que optamos por seguir andando y probar La Latina. En La Latina sólo había bares de viejos. Pero no bares de viejos de esos que les gustan a los hipsters y por lo tanto sólo hay hipsters y no viejos, no. Había grupos de octogenarios cenando. Esto nos dio bastante miedo y seguimos caminando, a probar a salir por Ópera. En Ópera directamente no había nada, era la ciudad fantasma con el ocasional grupo de hobos. Tras una hora o así obviamente nos fuimos a Malasaña, el único reducto que aún resiste estilo Aldea Gala, y conseguimos tomar unas cervezas, unos cócteles, y una salchicha vegana que sabía tanto a salchicha real que me la comí con sospecha y culpa. Finalmente fue una buena noche gracias a una buena compañía y al hecho de que probar cosas nuevas es una puta mierda y hay que preservar siempre las tradiciones.

La verdad es que fue un viaje un tanto Fracásibol®. También conseguimos perder un autobús en Segovia y tener que dar vueltas en coche durante una hora para luego acabar en el bus de los domingueros con la típica persona al lado que decide que es el momento de buscar cosas en YouTube y enseñárselas a su novio SIN auriculares. No diría que sólo por esto mereciese estar en el séptimo círculo del infierno, pero ganó el honor gracias a tener SONIDO en las TECLAS del móvil. Sonido en las teclas?! Qué es esto, 1999?! El actor?!

Los aviones bien, gracias a tener Speedy Boarding. O como diría mi autocorrect, "Apestoso Bigardona". Sí, mi autocorrect es un graciosillo de cuidao. Entre eso y los prepucios, me mata.

Bueno, adiós, que tengo que trabajar.