Wednesday, March 6, 2013

El Hak en Hakers


El sol ha brillado estos días y he sentido que estaba en un motel de carretera de California, sin poder salir, fugitiva de la justicia y escondiéndome de Louie. Louie podría ser mi antiguo chulo o camello. No lo he decidido.

Llevo cinco días sin abandonar la casa, con Cheech la gata. Creo que otro día más y empezarán a salir gatos de debajo de la cama. Por suerte no puedo comer gracias a mi sinusitis, y no me crecerán tarros de litro de Ben & Jerry's Chocolate Chocolate Chip para completar el cliché de CAT LADY.

Novedades? Estoy haciendo un Master en Transport for London. Creo que cuando haya pasado un año en Hackney podré presentarme a un empleo en TfL y sabré detallar las mejores rutas y horarios para ir desde cualquier punto de la ciudad a otro, con una especialidad en Aeropuertos y Terminales.
Gracias a mi extensa investigación, logré caerme en el gap del Overground. Tuve suerte y fue una caída técnicamente muy bien efectuada, con el mínimo riesgo para la vida y las extremidades, si bien aterricé sobre un envase que había contenido Fish & Chips sólo para agregar un poco más de humillación a la situación en general.
Decir que gracias a esto evito el Overground en hora punta cual perro de Pavlov, pero he conseguido llegar al trabajo via otra ruta en 70 minutos, 40 de los cuales paso echando una fika y luego tomando un café en el tren mientras leo un libro a la semana. Es un commute muy placentero, y soy una persona completa y activa.
Aunque hace tantos días que no voy al trabajo que a lo mejor se me olvida.

Más novedades... Traje a Mickey, mi minicadena, en el último viaje que hice a Madrid la semana pasada. Ahora puedo hacer una fiesta rock n roll. Sólo me falta tener más de tres amigos y I'm all set.

En Madrid... Bien. Es muy difícil conseguir salir, ya que la gente (sí, VOSOTROS) no quiere salir un Lunes. Ya ves tú, qué tendrá de malo salir un lunes? Las hermanas no nos rendimos y salimos un lunes. Decidimos que ya estaba bien de salir por el barrio, que íbamos a probar otros lugares. Optamos por Lavapiés. Yo en general desprecio Lavapiés, pero tras la buena experiencia del nuevo bar "El Gato Verde" pensé que encontraríamos algo que estuviese bien y no fuese hindú. Nos perdimos por Lavapiés y no encontramos nada satisfactorio, así que optamos por seguir andando y probar La Latina. En La Latina sólo había bares de viejos. Pero no bares de viejos de esos que les gustan a los hipsters y por lo tanto sólo hay hipsters y no viejos, no. Había grupos de octogenarios cenando. Esto nos dio bastante miedo y seguimos caminando, a probar a salir por Ópera. En Ópera directamente no había nada, era la ciudad fantasma con el ocasional grupo de hobos. Tras una hora o así obviamente nos fuimos a Malasaña, el único reducto que aún resiste estilo Aldea Gala, y conseguimos tomar unas cervezas, unos cócteles, y una salchicha vegana que sabía tanto a salchicha real que me la comí con sospecha y culpa. Finalmente fue una buena noche gracias a una buena compañía y al hecho de que probar cosas nuevas es una puta mierda y hay que preservar siempre las tradiciones.

La verdad es que fue un viaje un tanto Fracásibol®. También conseguimos perder un autobús en Segovia y tener que dar vueltas en coche durante una hora para luego acabar en el bus de los domingueros con la típica persona al lado que decide que es el momento de buscar cosas en YouTube y enseñárselas a su novio SIN auriculares. No diría que sólo por esto mereciese estar en el séptimo círculo del infierno, pero ganó el honor gracias a tener SONIDO en las TECLAS del móvil. Sonido en las teclas?! Qué es esto, 1999?! El actor?!

Los aviones bien, gracias a tener Speedy Boarding. O como diría mi autocorrect, "Apestoso Bigardona". Sí, mi autocorrect es un graciosillo de cuidao. Entre eso y los prepucios, me mata.

Bueno, adiós, que tengo que trabajar.

1 comment:

  1. Apestoso Bigardona, escribe más por favor, que es siempre una alegría leerte

    ReplyDelete