Querido Marty

Llevo ocho meses viviendo en 1885. Trabajo como herrero...

Bueno, realmente no. Estoy aquí, en mi casa de Wimbledon, a 4 de Abril de 2011.
Todo va bien. El trabajo es en ocasiones infernal, gracias a darte de bruces con trolls, YARDs y demás variantes. Pero por lo general satisfactorio.
Hoy he conseguido hacer una compra sin animal. Compré Soya Mince, la revolución del mercado, que me debe de haber costado unos 13 o 14 millones de libras. No pasa nada, todo sea por ser LEAN. Realmente no tengo ni idea, a lo mejor es barato. Who knows. Not me. I don't look at these things.

La primavera llegó temprana y todo es verde en esta pequeña isla. Menos mi pobre planta Kenan. Compré a Kenan y Kel pero Kel ha sabido prosperar mientras que Kenan se va asemejando poco a poco y cada día más a lo que se dice una lechuga podrida de esa que suelta líquido marrón en tu nevera.
También tengo a Le Plant y a Arbbourne. Son felices. Serían más felices sin moqueta. Pero no se puede tener todo en esta vida. Dicho esto, no tengo mesa, y llevo 3 meses así. A ver si conseguimos ir esta semana a comprar una. Y unas cortinas. Y una maceta. Y un mueble de cajones. Y doce piñas. Etc.

Paso mis días mirando al parque donde los chickens juegan al fútbol y los perros pasean a sus dueños lagers; escuchando música sin parar para compensar la falta de alboroto eclesiástico, comiendo cosas ricas y en ocasiones no muy saludables (Wotsits, anyone?) y paseando por los bosques de Surrey. Me he acostumbrado a la Diet Coke y he de decir que, aunque es un error, la vida con couk es mucho más llevadera. Hoy voy a comerme una patata. Ni que decir tiene lo llevadera que es la vida con patatas. Ya lo creo.

A veces pierdo el tren. Normalmente sin ningún tipo de reparo. Pero hay días que se va en mi cara. El hijo de puta. Hoy compré mi billete para mañana, esta vez no me hará una de sus triquiñuelas, oh no.
He visto el piloto de Mad Love. LIKE! NYC, Jason Biggs, NYC... Yeah ahora voy a ver los subsecuentes 7 episodios disponibles.

Espero que esta entrada satisfaga a los lectores por hoy.
Con un amor que el eco repetirá durante siglos,
Woodrow.